La imagen de un joven en aparente estado de inconsciencia en plena vía pública ha estremecido a los vecinos y a los usuarios de redes sociales. El video, que ya se ha hecho viral, pone nuevamente en el centro del debate el alarmante consumo de sustancias sintéticas entre la juventud.
La escena es cruda y triste. Un joven yace sobre una acera, semiconsciente, incapaz de reaccionar. Quien graba el video parece conocerlo, y con una mezcla de dolor e impotencia, intenta hacerle entrar en razón. Se le escucha decirle que abandone ese estilo de vida, que recapacite, que su madre lo espera. Incluso, en un momento del video, intenta llevarlo de regreso a su casa, pero el joven se niega rotundamente, visiblemente afectado por los efectos de una potente droga conocida popularmente como el químico.
Testigos que presenciaron la desgarradora escena aseguran que se trata de un muchacho tranquilo, respetuoso, que en otro momento fue motivo de orgullo para su familia. Según relatos de vecinos, es un joven que se graduó como panadero y que tenía sueños y metas por cumplir. No obstante, las mismas voces aseguran que ya había tenido conflictos dentro de su hogar, pues supuestamente llegó a robar dinero de su propia familia con el fin de adquirir esta peligrosa sustancia.

Lo que más ha estremecido a la comunidad no es solo la imagen del joven en tan crítico estado, sino la sensación de que casos como este están dejando de ser una excepción para convertirse en una realidad cada vez más frecuente en muchos barrios del país.
¿Qué es «el químico»? La droga sintética que arrasa silenciosamente
«El químico», como se le conoce en la jerga popular, es una mezcla sintética altamente adictiva y destructiva que ha ganado terreno entre los más jóvenes. Aunque sus componentes exactos pueden variar, normalmente incluye una combinación de solventes, químicos de uso industrial y otras sustancias que generan efectos alucinógenos y una fuerte dependencia desde el primer consumo.
A diferencia de otras drogas tradicionales, «el químico» se presenta como una alternativa más barata, pero sus consecuencias físicas y mentales son devastadoras. Genera un deterioro rápido del sistema nervioso central, afecta el comportamiento, reduce la capacidad de razonamiento y puede llevar a episodios de agresividad, convulsiones o estados de inconsciencia, como el registrado en el video.
Además, esta sustancia es fabricada sin ningún control sanitario, muchas veces en condiciones insalubres, lo que eleva los riesgos de intoxicación severa, daño cerebral permanente y hasta la muerte.
Especialistas en salud mental y adicciones han advertido que esta droga, al ser tan accesible y potente, está siendo cada vez más consumida por jóvenes en situación de vulnerabilidad, aquellos que no encuentran espacios de desarrollo, oportunidades o contención emocional dentro de su entorno familiar o social.
Una realidad que no podemos ignorar
Lo que ocurrió con este joven, más allá del video que ha circulado ampliamente en redes, refleja una crisis silenciosa que afecta a cientos de familias en distintos puntos del país. Las drogas sintéticas, como «el químico», no solo destruyen cuerpos, también desintegran hogares, fracturan comunidades y roban el futuro de nuestros jóvenes.
Es urgente que las autoridades, los líderes comunitarios y las propias familias reconozcan esta realidad y trabajen de forma conjunta para crear espacios de apoyo, prevención y tratamiento. Porque detrás de cada video viral hay una historia real, una madre angustiada, un padre desconsolado y un joven que alguna vez soñó con un futuro mejor.
Preguntas frecuentes sobre el impacto del químico en la juventud
¿Cuál es la principal causa por la que los jóvenes comienzan a consumir el químico?
Generalmente, el consumo inicia por presión de grupo, curiosidad o la necesidad de escapar de situaciones difíciles como problemas familiares, pobreza o falta de oportunidades.
¿El químico es legal o tiene alguna regulación?
No. “El químico” es una sustancia ilegal y altamente peligrosa. Su distribución y consumo están penados por la ley en muchos países, aunque su fabricación casera dificulta su control total.
¿Cómo pueden los padres detectar si su hijo está consumiendo esta droga?
Cambios bruscos de comportamiento, pérdida de peso, ojos rojos, actitudes violentas o retraídas y desaparición de objetos de valor pueden ser señales de alerta. Es importante actuar con empatía y buscar ayuda profesional.
¿Existe tratamiento para quienes consumen esta sustancia?
Sí. Hay centros de rehabilitación especializados en tratar adicciones a sustancias sintéticas. Sin embargo, el proceso requiere compromiso, apoyo emocional y, muchas veces, asistencia médica prolongada.
¿Qué papel juegan las redes sociales en la difusión de estos casos?
Las redes sociales pueden visibilizar problemáticas como esta, generando conciencia y presión social para que se tomen medidas. No obstante, es importante tratar estos contenidos con respeto y no con morbo, protegiendo la dignidad de las personas involucradas.