La noche de ayer se convirtió en una muestra clara de la tensión que viven las comunidades habaneras durante los apagones prolongados. En el barrio de Párraga, municipio Arroyo Naranjo, los vecinos lograron atrapar a un presunto ladrón que intentaba aprovechar la oscuridad para cometer un robo.
Según relatan testigos, el hombre fue sorprendido en plena acción, lo que provocó la rápida reacción de varios residentes que no dudaron en unirse para detenerlo. Un video difundido en redes sociales muestra el momento en que una mujer del barrio increpa al sospechoso, quien trataba de cubrirse el rostro para evitar ser identificado. La vecina lo confronta con palabras que reflejan la indignación general: “¿Por qué tú eres tan descarado, robándole a tus vecinos aquí en tu mismo barrio?”.
La escena dejó en evidencia cómo, ante la ausencia de una respuesta inmediata por parte de las autoridades, los ciudadanos se ven obligados a organizarse y actuar por su cuenta para defenderse de la delincuencia. Esta situación se ha vuelto cada vez más frecuente en la capital, donde la inseguridad crece de la mano con las dificultades cotidianas que enfrenta la población.
En Arroyo Naranjo, al igual que en otras zonas de Cuba, los apagones nocturnos han creado un escenario propicio para la criminalidad. La oscuridad deja a las comunidades vulnerables y con una sensación constante de indefensión. A esto se suma la escasez de alimentos y productos básicos, que intensifica la desesperación y alimenta los niveles de violencia y robo en los barrios más golpeados por la crisis.
Testimonio de vecinos
Los vecinos de Párraga aseguran que este no es un hecho aislado, sino parte de una serie de sucesos similares que mantienen a la población en alerta permanente. “Ya no podemos ni descansar tranquilos; en cuanto se va la luz, uno está pendiente de la puerta, de la ventana, de todo”, comentó un residente, reflejando el clima de inseguridad que reina en la zona.
El caso pone en el centro del debate la creciente necesidad de reforzar la vigilancia y ofrecer soluciones efectivas a una ciudadanía que siente que la delincuencia avanza mientras la respuesta oficial se queda corta. Para los habitantes de Arroyo Naranjo, el episodio de anoche no es solo un intento de robo frustrado, sino un recordatorio de la dura realidad que enfrentan día a día en medio de la crisis energética y social que atraviesa el país.
Preguntas frecuentes sobre la inseguridad en Arroyo Naranjo
¿Por qué aumentan los robos durante los apagones en Cuba?
La falta de iluminación facilita que los delincuentes actúen con mayor libertad, aprovechando la oscuridad y la menor visibilidad de los vecinos.
¿Cómo reaccionó la comunidad de Párraga ante este intento de robo?
Los residentes se organizaron rápidamente, logrando detener al sospechoso y evitando que escapara hasta la llegada de las autoridades.
¿Qué factores están influyendo en el aumento de la delincuencia?
La crisis económica, la escasez de alimentos y los apagones prolongados generan un ambiente de desesperación y vulnerabilidad que incrementa los delitos.
¿Es común que los vecinos tengan que enfrentar a los delincuentes?
Sí. Ante la falta de respuesta policial inmediata, muchas comunidades en Cuba optan por la autodefensa y la vigilancia colectiva.
¿Qué medidas pueden tomar los vecinos para protegerse en los apagones?
Organizar rondas de vigilancia, mantener comunicación entre hogares y denunciar colectivamente los incidentes son algunas de las estrategias más utilizadas.
