El mercado informal de divisas en Cuba amanece este domingo con nuevos movimientos que marcan la pauta de una semana tensa para el peso cubano (CUP). El dólar y el euro registran alzas notables, mientras que la Moneda Libremente Convertible (MLC) experimenta una leve caída, reflejando las contradicciones de una economía que continúa en estado de fragilidad.
Tasas de cambio actuales en el mercado informal

El billete verde avanza con fuerza y se ubica hoy en 430 pesos cubanos, un aumento de 10 CUP en las últimas 24 horas. El euro también continúa en terreno positivo, subiendo a 460 CUP, mientras la MLC, usada principalmente en tiendas estatales, sufre una ligera caída, situándose en 200 CUP.
Estos movimientos confirman que el mercado informal sigue siendo el verdadero termómetro de la economía cubana, en contraste con la estabilidad que intenta proyectar el sistema financiero oficial.
Se reactiva la presión sobre el peso cubano
El repunte del dólar y del euro refleja una creciente demanda de divisas, impulsada por la desconfianza en la moneda nacional y la falta de liquidez del sistema bancario.
En la práctica, los cubanos buscan asegurar sus ingresos ante una inflación que continúa afectando los precios de los productos básicos, los alquileres y los servicios.
En la última semana, las operaciones informales han mostrado un volumen mayor, especialmente en plataformas digitales, donde las tasas de cambio varían por hora según la oferta y la demanda.
“El peso ya no tiene estabilidad, cada día alcanza menos”, comenta un pequeño emprendedor habanero que asegura que buena parte de sus ventas se realizan en dólares o euros, incluso en efectivo.
Contrastes entre el dólar y la MLC: una señal de desbalance
Mientras las monedas extranjeras fuertes se aprecian, la MLC una de las divisas más utilizadas en tiendas estatales ha perdido valor. La caída de cinco pesos puede parecer mínima, pero refleja un descenso constante en su poder de compra.
La razón detrás de este retroceso radica en la limitada circulación de la MLC y en la disminución de la oferta de productos en tiendas que operan bajo este esquema. Ante esa situación, muchos consumidores han optado por cambiar su MLC a dólares o euros, buscando una mayor seguridad y movilidad de sus fondos.
Los economistas alertan: la tendencia podría consolidarse
Analistas financieros advierten que este comportamiento del mercado no es casual. El dólar se mantiene como la divisa más demandada por los cubanos, tanto dentro como fuera de la isla.
Su reciente repunte podría marcar el inicio de una nueva tendencia alcista si el Gobierno no implementa medidas efectivas para estabilizar el tipo de cambio.
La persistente inflación, la escasez de divisas oficiales y la incertidumbre sobre la anunciada “tasa flotante” mantienen la presión sobre el peso cubano.
“El mercado informal refleja la realidad que los números oficiales no muestran”, señaló un economista residente en La Habana. “La brecha entre ambos tipos de cambio se ha convertido en un abismo”.
Reacción ciudadana: entre resignación y cautela
En barrios habaneros y ciudades del interior, el tema del tipo de cambio vuelve a dominar las conversaciones cotidianas. Para muchos cubanos, el alza de las divisas no solo es una cifra más, sino un indicador directo del encarecimiento de la vida.
Los precios de alimentos, transporte y servicios básicos tienden a moverse en función de la cotización del dólar, lo que deja en una situación de vulnerabilidad a los trabajadores con salarios en CUP.
“Cada vez que el dólar sube, todo sube detrás”, comenta una madre santiaguera que depende de remesas enviadas desde el exterior. “Ya ni el dinero alcanza para lo básico”.
El futuro inmediato: incertidumbre con sabor a déjà vu
A corto plazo, los expertos no anticipan una corrección significativa del mercado. Por el contrario, si la demanda de divisas continúa creciendo, el dólar podría alcanzar los 440 CUP antes de finalizar noviembre.
El euro, por su parte, podría rebasar los 470 CUP si se mantiene la actual tendencia de compra.
En tanto, la caída de la MLC podría profundizarse si persisten los problemas de abastecimiento y conectividad bancaria, lo que empujaría a más personas hacia las transacciones en efectivo y fuera del circuito formal.
El mercado informal, con todas sus limitaciones, sigue siendo el reflejo más fiel del estado de la economía cubana: dinámico, impredecible y, sobre todo, desconfiado del peso nacional.
Preguntas frecuentes sobre el comportamiento del mercado informal cubano
¿Por qué se fortalecen el dólar y el euro frente al peso cubano?
Por la creciente demanda de divisas como resguardo ante la inflación y la falta de confianza en la moneda nacional, además de la escasez de efectivo y divisas oficiales.
¿A qué se debe la caída de la MLC?
A la reducción del poder de compra en tiendas estatales y la menor disponibilidad de productos, lo que ha llevado a los usuarios a preferir el dólar o el euro.
¿Podría estabilizarse el mercado en las próximas semanas?
Los expertos consideran poco probable una estabilización a corto plazo sin medidas económicas concretas. El peso sigue bajo presión.
¿Cómo afecta esta variación a los precios en la isla?
El aumento de las divisas encarece la mayoría de los productos y servicios, especialmente los importados o los que dependen del mercado informal.
¿Qué papel juega el gobierno en la regulación de este mercado?
Hasta el momento, las autoridades mantienen silencio sobre la prometida “tasa flotante”, lo que incrementa la incertidumbre entre la población.

