Ernesto Iznaga Rodríguez, señalado como uno de los responsables del trágico doble asesinato ocurrido el pasado 29 de junio en Cienfuegos, fue capturado en la madrugada de este domingo durante un operativo realizado por fuerzas del Ministerio del Interior (MININT). La detención tuvo lugar en la comunidad rural de El Granizo, en el municipio de Cumanayagua, y marca un paso importante en la investigación que mantiene en vilo a toda la provincia.
La operación, que movilizó a unidades especiales conocidas como «boinas negras» junto a agentes encubiertos, culminó con la localización del presunto homicida, quien se encontraba escondido en una vivienda de la zona. El despliegue fue sorpresivo y contundente, sorprendiendo a los residentes de la localidad, que apenas podían creer que un prófugo de la justicia se ocultaba entre ellos.
Según narraron algunos vecinos, Iznaga se refugiaba en la casa de una mujer que presuntamente le brindaba cobertura para evitar su captura. Las autoridades no solo lo detuvieron a él, sino que también procedieron al arresto de la persona que lo albergaba, en cumplimiento de la ley que penaliza a quienes encubren o ayudan a criminales.
Uno de los testigos presenciales del operativo relató cómo se desplegó la acción: “Aquello fue como una película. Entraron por todos lados, con linternas, armas largas, y lo sacaron esposado. Dicen que entraba por detrás de la casa, desde el monte, y nadie sabía que estaba allí. Aquí nadie duerme tranquilo desde lo que pasó».
La detención de Iznaga no solo ha despertado un suspiro de alivio en la población, sino que también ha abierto una caja de Pandora sobre sus antecedentes. Diversas fuentes comunitarias aseguran que el detenido no era un desconocido en el entorno rural, donde ya arrastraba denuncias por amenazas, agresiones físicas e incluso ataques contra animales de campesinos, especialmente en localidades como Venta del Río, La Sabana y Paraíso. Vecinos afectados lo describen como una figura temida y violenta que por largo tiempo sembró el terror en la zona.
“El Chivero” sigue prófugo y la cacería no se detiene
Aunque la captura de Iznaga representa un avance significativo en la investigación, el caso aún no se cierra. Otro de los implicados, conocido con el alias de “El Chivero”, continúa prófugo. Fuentes cercanas al caso afirman que se encuentra huyendo a través de montes y terrenos agrestes, sin provisiones ni calzado, tratando de evadir a las fuerzas del orden. La presión es constante, y los cuerpos policiales, junto a campesinos organizados, siguen su rastro de cerca.
La búsqueda de este segundo sospechoso ha generado un ambiente de colaboración entre las autoridades y la ciudadanía. En declaraciones recientes, medios locales alertaron que todo aquel que le brinde apoyo al fugitivo será procesado con el mismo rigor que los autores materiales del crimen. La advertencia es clara: encubrir a delincuentes traerá consecuencias legales severas.
Además, según el perfil informativo “Las Cosas de Fernanda”, se está investigando la posible implicación de otros individuos que podrían haber actuado como cómplices antes o después del homicidio. Informes no oficiales indican que se están recibiendo denuncias constantes de ciudadanos que quieren aportar pruebas o nombres, buscando justicia para las víctimas y tranquilidad para sus comunidades.
Una noche fatídica en “El 24”: el origen del crimen
La noche del 29 de junio, el ambiente en el bar “El 24” era como cualquier otro fin de semana: música alta, bebidas circulando y gente disfrutando. Sin embargo, lo que parecía una noche común terminó en tragedia. Según diversos testimonios, una discusión entre varios individuos, posiblemente bajo los efectos del alcohol, escaló en cuestión de minutos hasta convertirse en un acto de extrema violencia.
Las víctimas, Lester Leal y Luardys Agulle Jiménez, ambos jóvenes conocidos en la comunidad, fueron atacados brutalmente frente a sus familiares. Entre los testigos del hecho se encontraban una mujer embarazada y un niño, quienes también resultaron heridos en el violento incidente.
Luardys falleció en el mismo lugar, mientras que Lester fue trasladado con vida a un centro hospitalario, donde lamentablemente murió poco después. El dolor y la indignación se intensificaron cuando la familia denunció públicamente que las autoridades tardaron en responder al llamado de auxilio, alegando incluso falta de combustible para el levantamiento del cuerpo, lo que despertó una ola de críticas hacia los mecanismos de respuesta institucional.
Otro implicado ya está tras las rejas
Días después del crimen, fue capturado Yoslayny de la Rosa Rodríguez, propietario de una motocicleta usada en la huida de los agresores. Aunque no participó directamente en el ataque, su rol fue clave en la fuga del lugar. Transportó a los dos principales sospechosos inmediatamente después del crimen, lo que lo convierte en cómplice de acuerdo con la legislación vigente.
Las investigaciones siguen abiertas y las autoridades aseguran que ningún implicado quedará sin enfrentar la justicia. La población, por su parte, sigue exigiendo respuestas y acciones contundentes.
Preguntas frecuentes sobre el caso del doble homicidio en Cienfuegos
¿Quién fue detenido recientemente en relación con el caso?
Ernesto Iznaga Rodríguez fue arrestado durante un operativo conjunto del MININT en la localidad de El Granizo. Es señalado como uno de los autores materiales del crimen.
¿Dónde ocurrió el asesinato?
El doble homicidio tuvo lugar en las inmediaciones del bar “El 24” en la ciudad de Cienfuegos, durante la madrugada del 29 de junio.
¿Quiénes fueron las víctimas?
Los jóvenes Lester Leal y Luardys Agulle Jiménez perdieron la vida como resultado del ataque. Ambos se encontraban compartiendo con sus familias al momento de la tragedia.
¿Qué papel jugó Yoslayny de la Rosa Rodríguez en el crimen?
Aunque no participó directamente en la agresión, fue quien ayudó en la huida de los asesinos en su motocicleta, lo que lo convierte en cómplice.
¿Qué medidas se están tomando contra quienes ayuden a los prófugos?
Las autoridades han dejado claro que toda persona que brinde asistencia o refugio a los implicados será procesada con la misma severidad que los autores materiales del crimen.
